UN FINCA HISTORICA LINDANDO CON EL RIO ERESMA

Según está documentado, esta singular propiedad fue fortaleza en el siglo XI y formó parte de la hacienda del Monasterio de Silos desde 1.125. Actualmente conserva un cruceiro medieval con símbolos jacobeos, que la han convertido en uno de los hitos de Camio de Santiago, que discurre junto a la propiedad.

La finca cuenta con una superficie de 78 hectáreas de terreno repartido en 40 ha. de pinar de fruto, 18 ha. de regadío de siembra y 20 ha. de árboles de ribera, con 5 km de ribera con el río Eresma.

Dentro de la finca existe un armonioso conjunto de originales construcciones, algunas de ellas rehabilitadas, que se encuentran rodeadas de un cuidado jardín de 2 ha. de terreno, con un bonito lago y grandes árboles ornamentales.

Con un total de 3.420 m² construidos, el conjunto está formado por varias naves agrícolas, dependencias para labor, salones sociales, y dos viviendas. Además, en el antiguo palomar, de forma circular, se ha acondicionado una bonita capilla.

La casa principal es un edificio de 320 m² construidos en una planta en forma de L que dispone de un gran salón social con acceso desde el jardín y las dependencias de la vivienda: salón comedor, cocina, dos dormitorios con vestidor y baño y una acogedora suite con acceso independiente.

Junto a la casa principal se encuentra la casa de los guardas, con salón comedor, cocina, 3 dormitorios y dos baños. En una de las alas del edificio se sitúa una cocina con office abierta al jardín.

Las naves agrícolas, así como las cuadras para caballos, se distribuyen en torno a la zona ajardinada formando todo ello un agradable conjunto. 

El acceso a la propiedad es por camino de tierra y en su interior cuenta con una red de caminos en perfecto estado que permiten recorrer sus 78 ha. fácilmente. Cuenta con transformador propio e instalación de electricidad, 2 pozos de agua con planta potabilizadora, depuración de aguas residuales, alumbrado de las zonas exteriores, y concesión de agua para riego de 7 ha. de 5,60 l/seg.

Todo su terreno forma parte de un coto de Caza Mayor y en ella es fácil ver corzos y jabalíes, además de especies de caza menor. 

La propiedad se encuentra a 35 km. de Valladolid, en la comarca de Tierra de Pinares, un lugar con excelentes comunicaciones donde el contacto con la naturaleza y el mundo rural está asegurado.